Cavitación
Cavitación
La cavitación ultrasónica es un tratamiento que consiste en la emisión de ondas de baja frecuencia (ultrasonidos) que actuarán a nivel de la hipodermis. En zonas profundas de la piel donde se encuentra el panículo adiposo.
Estos ultrasonidos son unas vibraciones mecánicas, inaudibles a nuestros oídos, que causarán los siguientes efectos:
- Efecto térmico por rozamiento molecular. Es decir, se sentirá calor en la zona que se esté tratando.
- Efecto químico. Producirá una mayor permeabilidad en las células. En este caso células grasas que estarán en la zona del tratamiento.
- Efecto cavitación. Son unas microburbujas o microcavidades (de ahí su nombre), que se forman en el líquido que tenemos entre las células, (intersticial).


Estas microburbujas, debido a la presión que se les aplica, implosionan. O sea, explotan, rompiendo las células grasas de su entorno. Así su contenido será desechado por el organismo a través del sistema linfático.
Nuestra cavitación trabaja con el sistema de liposucción cavitacional modulada. Esto significa que trabaja con dos tipos de ondas. La primera a una frecuencia de 30 Khz , que trabaja a nivel profundo. Pero además como el ultrasonido tiene tendencia a dispersarse, la otra onda con frecuencia de 1 Mhz, encapsula a la primera para evitarlo.
De esta forma el sistema es poco invasivo, sólo se trabaja la zona de grasa. Tampoco notaremos ruido en los oídos porque no se transmitirá el ultrasonido a través de los huesos.
Está indicada en acúmulos grasos localizados. En remodelación corporal y en celulitis. El tratamiento lo complementamos con infrarrojos no visibles antes de la cavitación y presoterapia o electroestimulación después.
Antes de realizarse un tratamiento de cavitación pregunte en qué casos está contraindicada.
El número de sesiones a realizar siempre será personalizado pero es aconsejable 1 vez a la semana con un máximo de 40 minutos por sesión.
Puedes solicitar visita en nuestro centro para diagnóstico gratuito y sin compromiso.
